CRÍTICAS: 'EL VERANO DE LOS PECES VOLADORES' Y 'LA JAULA DE ORO' - FESTIVAL DE LIMA

EL VERANO DE LOS PECES VOLADORES de Marcela Said

Guión: Marcela Said y Julio Rojas

Reparto: Francisca Walker, Gregory Cohen y Roberto Cayuqueo

Película que muestra paisajes mal fotografiados y un símbolo del incomprendimiento adolescente demasiado escondido dan como resultado un desesperante montaje de imágenes sin sentido, escenas demás, situaciones mostradas que no tienen nada que ver en la historia, y por último, ni siquiera hay historia.

Si regamos situaciones y ponemos tres o cuatro chistes cada 20 minutos en una cinta, ¿estaremos haciendo una película? Cero en fotografía (algunas escenas parecen ni siquiera haber sido trabajadas con el arte de la luz), cero en guionización para la pantalla (parece una fusión entre documental y ficción mal lograda), cero en logros de personajes (los personajes ni siquiera tienen carisma), crisis histórica o clímax, cero en todo.

Lo salvable: Las actuaciones que hasta parecen sacadas de un documental pero que no expresan ni la más mínima compatibilidad ni el más mínimo detalle a recordar. La cinta es una lágrima total sin sentido, nula identificación de la audiencia en ninguna situación dramática.

LA JAULA DE ORO de Diego Quemada-Díez

Guión: Lucía Carreras, Gibrán Portela, Diego Quemada-Díez

Reparto: Brandon López, Rodolfo Domínguez y Karen Martínez.

El truco, a la hora de planear este tipo de películas, está en hacer que la escena, por más larga que se torne, y por más tiempo de duración que el plano elegido tenga en pantalla, no se pierda al público y sus ganas de querer seguir viendo lo que está por venir en la trama. La Jaula de Oro lo hace con una fórmula extraña pero agradable, aunque algo que criticar en un plano más ‘marketero’ sería que el título no tiene nada que ver con la historia y es una metáfora demasiado forzada que no aporta nada de nada a la película, al contrario, le resta atención.

Lo bueno: Los personajes evolucionan, son impredecibles y tienen dimensiones cuantiossas e inesperadas. Obligan al espectador a ponerse en la piel del personaje y pensar en qué hacer si se estuviera en su lugar. Interesantísimas sensaciones muy apreciables en tiempos en los que cada vez se tiene a la mano menos opciones del librarse de las comparaciones.

Lo malo: Al ser una película hecha pensando en los festivales de cine, se vuelve a abusar de los planos largos y situaciones sosas en algunos momentos que bien podrían cortarse para dar mayor agilidad a las escenas.